M@tando a mi otro yo

Estoy agradecida por mi antiguo yo, que ha creado la necesidad de crear a mi presente yo; consciente y clara de su mente, constructora de su estado mental y emocional, Creadora por excelencia. 

Estoy agradecida porque desde la ignorancia y la incomodidad florece una necesidad latente de buscar, de crecer y de mejorar

Voy a ser consciente de como pasare a ser, una persona más feliz, más abundante; que logra todo lo que se propone; coherente en pensamiento, palabras y acción. 

Veo a mi otro yo morir, y le agradezco, porque en su inquietud y desdén, aprecie la quietud y la dicha, la bondad y el amor hacia todos. 

Somos constructores de nuestra vida, pero no en apariencia o como teoría filosófica, si no literalmente. Hasta que no decidimos ser responsables de esto, pensaremos que la vida nos sucede y seremos victimas de nosotros mismos.

Yo fui victima de mi misma, queriendo un resultado especifico pero con una mentalidad no unificada y coherente con lo que se que merezco, mi avance no tenia hasta ahora, la velocidad que soy capaz de crear, con una mente unificada. 

Esto puede sonar muy raro y hasta misterioso o esotérico, pero, es una practica consciente de pensar, sentir y actuar en base a lo que quiero, esta unicidad es lo que crea grandes cambios.

He leído muchos libros sobre del poder humano, en teoría se muchas cosas, pero en practica, reconozco que me faltaba aplicar, y como siempre, gracias a un momento de crisis y a mensajes que me venían resonando (como dice el dicho; cuando el alumno esta preparado, aparece el maestro) mi mente conecto con el mensaje de 'El Secreto' y la Ley de Atracción que había escuchado sopotocientas veces y que ya casi era un cliché en mi mente, pero al darme cuenta de la coherencia y de la importancia, decidí direccionar mi mente; toda, a mis objetivos, a lo que merezco y a lo que quiero para mi y todo mi cuerpo empezó a vibrar de forma diferente, simplemente fluía de mi una sonrisa y una satisfacción y me di cuenta de como se alineaba mi mente. Mi mente parecía que estaba esperando este momento, y la alegría no se sentía afuera si no adentro. Entonces me di cuenta, que la mente se siente bien cuando la diriges, y que nosotros somos como un programa que solo puede funcionar cuando todos los códigos están alineados para su función, de lo contrario sale error. 

Es un trabajo más sencillo de lo que parece, porque si es lo que necesitamos, no debe ser tan complicado. Lo cierto es que te sientes vivo de nuevo, consciente y coherente. 

Reconoces que las palabras y los pensamientos; tienen el poder de ayudarte a avanzar o de dejarte en el camino.